Nací en el Cairo, Egipto. Al terminar el bachillerato ingresé al Instituto de música y arte de la misma ciudad, 3 años más tarde en 1973, inició la guerra con Israel y por ésta razón en 1974 decidí viajar a Viena y continuar mis estudios allí. Como tenía que trabajar para vivir y al mismo tiempo atender mis clases y practicar el piano varias horas al día, la situación se tornó complicada, lo que motivó buscar otros rumbos que me llevaron a Londres, lugar donde mi vida cambió totalmente. Allí realicé unos cursos en hotelería trabajando al mismo tiempo en restaurantes y en una comercializadora de vinos donde se despertó mi interés por este tema.
Años más tarde logré abrir mis propios negocios, me casé con una colombiana y tuvimos 2 hijos. Todo esto en un período de 14 años, después de los cuales decidimos venirnos a vivir a Medellín, Colombia. Era el año 1988, mi intención era tener algo propio y unos meses más tarde abrí una taberna restaurante en el sector del Poblado. Después de varios meses de mucho éxito llegaron los tiempos difíciles, la violencia en la ciudad se recrudeció y lamentablemente no tuve otra opción que vender y regresar a Inglaterra en busca de una solución.
Dejar mi familia en Medellín fue difícil, mi consolación llegó meses más tarde cuando tuve la oportunidad de trabajar como sommelier en el famoso crucero inglés Queen Elizabeth 2. Fue difícil al comienzo, pues nunca había experimentado trabajar en el mar, pero de cierta manera fue el trabajo perfecto para mí en ese momento, me dio la oportunidad de regresar a Colombia a visitar mi familia cada final de contrato, por un período de 4 a 6 semanas. Mi plan era permanecer en el barco por 1 ó 2 años pero estos se convirtieron en 15, tiempo en el cual aprendí más y más acerca del vino, visité viñedos alrededor del mundo y tuve la oportunidad de catar maravillosos vinos, perfeccionando al mismo tiempo el arte del maridaje. En resumen, fue una experiencia maravillosa, sin embargo ya era tiempo de regresar a casa y a finales de 2007 vine a Colombia para quedarme definitivamente.
Desde principios de 2008 he dedicado mi tiempo a compartir mis experiencias por medio de catas, asesorías, charlas y capacitaciones. Desde entonces también he venido dictando un curso básico de cata de vinos inicialmente en la Casa Museo Otraparte, el cual ha tenido bastante acogida y por el cual han pasado más de 2000 personas quienes hacen parte del Club del Vino. Todo esto gracias a la nueva cultura de esta bebida en Medellín y a sus amantes… ustedes. Luego de realizar el nivel 1 en otraparte, muchos integrantes del club del vino han continuado los niveles 2, 3, 4 y 5, profundizando el tema y aprendiendo técnicas avanzadas de la cata del vino.